“Si pudiera decirlo no tendría que bailarlo” Isadora Duncan

 

Y así comenzó esta aventura de abrir un nuevo espacio de aprendizaje. Un blog donde compartir movimientos y palabras, experiencias y reflexiones, propuestas y recursos.

Hace años que me ronda esta idea pero nunca encontraba el momento de lanzarme a este océano donde las palabras me permitan sumergirme  en la gran danza del compartir.

En estos últimos tiempos  he puesto en movimiento toda mi energía, y entusiasmo para explorar el   sentido del aprendizaje que le regala grandes dosis de facilidad al aprendiz.

Me incluyo en este rol, y desde ahí comenzó mi propia danza de diseño.

Sentí que el camino de la facilidad en el acto de aprender, tenía mucho que ver con el movimiento. Y ahora que escribo me doy cuenta que así lo hice, antes de convertir  en palabras la experiencia, las ideas, los sueños… necesitaba bailarlo.

Exploré muchos espacios diferentes de aprendizaje, el encuentro con el movimiento podía ser cualquier lugar, en tierra, en el aire o  incluso en el agua, bucee por cuevas profundas, aguas claras,  turbias, a temperaturas frias, tibias, y demasiado calientes para mantenerme en ellas mucho tiempo, a veces con aire y otras casi sin el me sumergí con la idea de aprender, jugar, disfrutar, regalar,…pero sobre todo prepararme para compartir lo que la vivencia y el movimiento me trae a la vida.

Y hoy que me lanzo a este desafío descubro con mayor claridad de donde emerge la inspiración para escribir igual que danzo. Y viene  de ti ,de todos los que encontré a mi paso, de  cada una de esas personas que se han permitido SER MOVIMIENTO, SER AUTÉNTICO, y SER aprendiz, gracias a todas ellas hoy  comienzo a fluir en este inmenso mar de posibilidades.

Te regalo  una refrescante y cálida bienvenida no sin antes invitarte a danzar todo aquello que necesites contar.